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Un hombre fue detenido en la localidad de Amberes, en Bélgica, luego de que intentara atropellar a una multitud de personas en una calle comercial que siempre está muy concurrida.

El auto correspondía a un Citroën rojo con patente francesa el que finalmente no logró su cometido ya que los transeúntes lograron esquivarlo.

El hombre fue perseguido por la policía y al lograr detenerlo encontraron que en el interior del vehículo llevaba varias armas e iba vestido con ropa de camuflaje.

Por el momento la zona se mantiene acordonada y los habitantes de Amberes se encuentran alertados para que transiten con cuidado.

Este violento hecho sucede un día después del atentado terrorista sucedido en las afueras del Parlamento británico, el que hace pocas horas fue reivindicado por el Estado Islámico.

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