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Con el fin de dismunuir los episodios críticos de contaminación en la capital, el lunes se dio luz verde al plan antiesmog, el que estuvo casi un año en tramitación.

El proyecto conocido como “Santiago Respira” contempla entre sus más de 120 artículos, la restricción permanente de dos digítos en vehículos catalíticos que sean previos a 2012, entre los meses de mayo y agosto, junto con la prohibición de calefactores y cocinas a leña.

Según consignó La Tercera, el ministro de Medio Ambiente, Marcelo Mena, destacó que la Contraloría confirmara la legalidad del plan de descontaminación, quien explicó que esto va a “permitir que exista una cantidad reducida de episodios críticos”.

Por otra parte, el intendente metropolitano, Claudio Orrego, señaló a nuestro medio asociado, que esta medida requiere de la “responsabilidad y el compromiso de todos los santiaguinos”.

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